Las personas pensamos cómo hablamos: las palabras y metáforas que utilizamos a diario, y a menudo de forma mecánica, tienen la capacidad de dar forma a nuestra forma de entender el mundo. Por eso es importante reflexionar sobre «cómo» hablamos, y ser capaces de reconocer los elementos estructurales de racismo que «reconstruimos», legitimamos y normalizamos: todo ello, a partir de una comprensión de los marcos mentales opresivos que nuestras palabras evocan.
Durante la formación reflexionaremos sobre cómo funcionan estos mecanismos, analizaremos las características que tienen las narrativas opresivas (racistas) y propondremos algunas pautas para construir narrativas transformadoras de los «marcos».
Una formación enfocada hacia profesionales de la intervención social que desarrollan su trabajo en el ámbito de la dinamización de grupos, o en el ámbito de la comunicación.